Expertas en Higiene
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Inicialmente, una correcta evaluación general de riesgos debería identificar y evaluar cualitativamente los productos químicos utilizados, así como los subproductos que se puedan generar durante los procesos de trabajo a partir de la información contenida en las fichas de seguridad de los productos, de la información facilitada por la empresa, y mediante la visita de la técnica de prevención in situ para observar las metodologías de manipulación y tratamiento de estos.
Derivada de esta evaluación cualitativa inicial, mediante la aplicación de métodos COSHH y/o INRS del INSST, y bajo criterio técnico, ya podemos determinar de una manera más específica, en la evaluación inicial de riesgos, las posibles evaluaciones cuantitativas por vía inhalatoria que se deberían realizar por parte de la empresa.
Se debe tener en cuenta que esta metodología no tiene en cuenta las vías de exposición no respiratorias que también pueden suponer una fuente de riesgo importante para las personas trabajadoras, especialmente la vía dérmica y la parenteral.
Para la metodología de muestreo cuantitativo se aplican los criterios contenidos en la NORMA UNE EN 689:2019, asegurando así una calidad en todo el proceso de recogida previa de información, toma/conservación/envío de muestras, y tratamiento estadístico de los datos obtenidos. Simultáneamente se consulta con un laboratorio de análisis la tipología de los captadores a utilizar, los tiempos de muestreo y otros temas técnicos a tener en cuenta.
Una vez se ha realizado la toma de muestras, se envían al laboratorio de análisis para obtener datos de concentración de agente o agentes químicos objetos de la evaluación, mediante la aplicación de las técnicas de análisis establecidas por en contaminante y el tipo de soporte.
Posteriormente, el laboratorio envía un informe con los resultados obtenidos al Servicio de Prevención y éste realiza un informe final evaluando cada uno de los agentes químicos en función de: las concentraciones obtenidas, los tiempos de exposición de las personas trabajadoras al agente, la gravedad de los efectos del agente químico y el Valor Límite Ambiental del agente (VLA-ED o VLA-EC), valorado la exposición como CONFORME o NO CONFORME.
En este informe final, en función de la graduación del riesgo y valoración, se elabora una propuesta de medidas a implantar por parte de la empresa para eliminar o reducir al máximo la concentración del agente químico en ambiente, para el control de la vigilancia de la salud periódica de las personas trabajadoras y para el control periódico mediante evaluación cuantitativa.
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https://rqweb.insst.es/https://riskquim.insst.es/riskquim/cb/
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